El grado de manipulación es tan enorme en nosotros que nos es imposible hacernos conscientes de la gravedad de la situación a la que nos enfrentamos.
Estamos absolutamente sometido a los "fuegos artificiales" -televisión, cine, prensa- que nos distraen de los problemas reales, que nos vuelven por tanto indolentes e ineficaces para poderlos solucionar. Han logrado anular completamente en nosotros cualquier opción a reaccionar.
La educación existente, el modo de vida impuesto, los valores infundidos, las distracciones a las que nos someten... han hecho de esta generación, una generación de seres irresponsables e ineficaces.
La manipulación es profunda y definitiva en esta generación.
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